La relaciones de pareja son un 💨, pero conversando se entiende la gente ¿no? JAJAJA.
Quise abrir este post con jocosidad, porque quienes hemos tenido pareja entendemos que cada cabeza es un mundo y constantemente hacemos acuerdos con el otro para crear un nosotros, una unidad conformada por dos individuos.
Las relaciones de pareja constituyen un elemento fundamental en el ciclo vital de las personas. Así como en la adolescencia nos juntamos y creamos amistad con personas con las cuales tenemos afinidad y similitudes en gustos, lo mismo ocurre con las parejas, siendo la amistad aquello que trasciende. Para unos en intimidad y para otros en pasión y compromiso, persiguiendo la concepción de compartir tu vida y transformarla en pareja.
Un poco a ello se aspira en el proceso madurativo y de crecimiento que se establece en nuestra cultura, no obstante, hay una gran cantidad de elementos que se juegan en la construcción de una relación que bien pueden beneficiar o entorpecer su formación.
Las relaciones derivan en acuerdos compartidos que se relacionan con el manejo del dinero, sexualidad, familia, amigos, parentalidad, proyección del futuro, entre otros puntos que convergen a la pareja, siendo la comunicación la base que asienta una buena relación.
Estar en pareja es una negociación constante donde coexisten, en muchas ocasiones, distintos roles y estilos de apreciación propia de la vida y el entorno que los rodea.
¿Qué podemos hacer para llevar una relación sana?
-Amar desde la libertad y el respeto
-Comunicar de manera efectiva y asertiva
-Negociar y plantear soluciones intermedias
-Compartir tiempo con la pareja
-Mimar la relación
-Transformar si es necesario
-Confiar en el otro
“Si le hubiera cortado las alas habría sido mío, no habría escapado. Pero así, habría dejado de ser pájaro. Y yo… ¡yo lo que amaba era el pájaro!” (Mikel Laboa, cantautor español de finales del siglo XX).
